Cada curso académico que empieza los usuarios de la piscina del colegio se plantean preocupaciones/miedos por el contagio de papilomas y moluscos. En el siguiente enlace accederás a un documento explicativo sobre dichas infecciones y sus cuidados, que además contiene imágenes para identificarlos.
Es necesario que todas las familias cuiden y vigilen a sus hijos para detectar su contagio y evitar su propagación.
Según la dirección del colegio, los índices de contagio están dentro de los índices normales, por lo que no debemos sobrealarmarnos en ningún caso.
MEDIDAS DE PREVENCIÓN QUE DEBEN ADOPTARSE EN CASO DE DETECCIÓN
Si se tienen dichas verrugas, al igual que en el caso de los molluscum, los niños no pueden acudir a la clase de natación hasta que no han desaparecido los papilomas, según se indica en el Decreto 80/1998, de 14 de mayo, por el que se regulan las condiciones higiénico sanitarias de piscinas de uso colectivo, en el que dice en su art. 35 que “ninguna persona afectada por
enfermedades contagiosas de transmisión hídrica o dérmica, podrá acceder a la zona reservada a los bañistas”.
La dirección del centro, asesorada por el Gabinete Medico, aplica la legislación establecida aún sabiendo que son decisiones controvertidas y que hay profesionales de la salud que, a pesar de dicha legislación, no restringen el uso de la piscina.
Asimismo, exige que se declare al tutor correspondiente la presencia de dicha infección para evitar el contagio a otros alumnos.